inicio > acusaciones
 


La Cobra Kali, Fiscal del Reino Animal, acusa a los humanos de graves crímenes contra la fauna terrestre, por los que pide las máximas penas contempladas en la Ley de la Jungla, de los Mares y de los Cielos. Estos crímenes se dividen en tres categorías:

Calumnias

¡Cerdo! ¡Hijo de perra! ¡Besugo! ¡Bicho! ¡Víbora! ¡Burro! ¡Rata! ¡Salamandra! ¡Pájaro! ¡Cabrón!

Los diccionarios de todo el mundo están llenos de tales insultos que calumnian a los animales citados. Los humanos, en su infinita arrogancia, han llegado a convertir a la misma palabra "animal" en insulto, negando su propia condición animal y su parentesco con el resto de la fauna terrestre.

Pero aun hay más. Este tipo de vocablos son sólo la antesala de una repulsiva pocilga lingüística de expresiones, creencias falsas y humillaciones. Los humanos se acusan los unos a los otros de "sudar como cerdos", cuando los cerdos no sudan; dicen "estás loco como una cabra", mientras que son ellos los que han inventado el estrés, la depresión y un sinfin de patologías mentales; pueblan sus cuentos infantiles con lobos feroces, a pesar de que la ferocidad humana no tiene igual entre la fauna terrestre. Según la Acusación, son calumnias inexcusables.

Al Abogado Filos, sin embargo, esta acusación no le preocupa, dado que existen muchas otras expresiones, creencias y prácticas que valoran muy positivamente a las demás especies, y, en sus propias palabras, "no hace falta la memoria de un elefante para recordar muchas de ellas".

Malos Tratos

Desde el inicio de la civilización, los humanos han capturado, domado y esclavizado a miles de millones de seres vivos, forzados a trabajar en el transporte, los cultivos, la caza, la guerra, el entretenimiento y muchos otros ámbitos. A otros les encierran en auténticos campos de concentración, hacinados en espacios diminutos, para extraerles sus huevos o su leche materna, o incluso para luego matarles por su carne o sus pieles. Últimamente se han cometido atrocidades aun mayores en el nombre de lo que llaman "la ciencia", torturas crueles en lugares secretos denominados "laboratorios".

Los testigos de la acusación ofrecerán su testimonio de primera mano, y numerosas pruebas demostrarán la severidad y amplitud de estos abusos.

¿Será capaz la Defensa de rebatir o excusar toda esta barbarie? Filos aquí se prepara para uno de los más importantes desafíos de su carrera canina. Pero desde su propia relación privilegiada con los humanos, los perros saben que no hay sólo crueldad en el corazón de sus amos.

Genocidio

La expansión de Homo Sapiens por todo el planeta ha tenido consecuencias nefastas para las criaturas salvajes. La invasión de las ciudades, los campos, las fábricas y las carreteras han ido acompañadas de la destrucción y degradación de bosques, ríos, costas y otros ecosistemas. En muchos casos, se han llevado a cabo auténticas campañas de exterminio contra ciertas especies, empleando pesticidas, cepos, armas de fuego y otros mortíferos ingenios humanos. El resultado es una extinción masiva como la que acabó con los dinosaurios hace sesenta y cinco millones de primaveras. Últimamente, la acción de esta plaga humana está alterando incluso el clima planetario, gracias a los humos con los que intoxica el aire. Y a pesar de que algunos humanos se han dado cuenta de ello y tratan de limitar los daños, parecen incapaces de tomar las medidas necesarias.

Esta última y más grave de las tres acusaciones pondrá a prueba todo el olfato y la inteligencia del Abogado Defensor. Si no logra salvarnos de la quema, la humanidad se enfrentará a la extinción preventiva de toda la especie.

 

 


[email protected]

© Eduardo Jáuregui 2006
Ilustraciones de Ricardo Martinez